Cuando pensamos en salud capilar y los diferentes motivos que pueden provocarnos calvicie, pensamos en la alopecia androgenética casi exclusivamente. En este artículo hablaremos sobre tinea capitis, una infección que puede provocar zonas calvas y otros síntomas que veremos a continuación.
La tinea capitis es una infección generalmente localizada en el cuero cabelludo y el cabello, provocada por hongos llamados dermatofitos. Aunque esta infección afecta principalmente al área del cuero cabelludo, también pueden verse perjudicadas otras zonas como las cejas y pestañas.
La tiña de la cabeza (o tinea capitis) es altamente contagiosa, por lo que es necesario diagnosticarla a tiempo, para minimizar sus efectos en la piel y evitar la propagación. Sus síntomas, como veremos, son diversos y pueden presentarse todos ellos o algunos.
Existen dos tipos de tinea capitis:
- Inflamatoria
Puede ocasionar placas de alopecia eritematosa, lesiones escamosas, foliculitis y nódulos denominados Querion de Celso. Estas lesiones pueden ir acompañadas por prurito, dolor en determinadas áreas, fiebre e hipersensibilidad.
- No inflamatoria
La tinea capitis no inflamatoria es la más frecuente de las dos variantes y se caracteriza por la ausencia de reacción inflamatoria. Este tipo de tinea presenta lesiones descamativas y alopécicas con varios puntos negros, en donde se encuentran los pelos que han quedado rotos a la altura del cuero cabelludo.
En algunos casos graves de tiña de la cabeza, la inflamación puede agravarse en la zona infectada y dejar cicatrices o provocar una pérdida capilar permanente.
Causas de la tinea capitis
La tinea capitis esta causada por una variedad de hongos tipo moho denominados dermatofitos. Estos hongos actúan sobre la capa superior del cuero cabelludo y el tallo del cabello.
Es importante aclarar que la tiña de la cabeza no está originada por parásitos. El trastorno genera una infección en la piel que toma forma circular y es fácilmente distinguible a simple vista.
Como hemos dicho anteriormente, la tiña capitis es contagiosa y puede trasmitirse de diferentes formas:
- De persona a persona: Estableciendo contacto físico con una persona infectada.
- De objeto a ser humano: Al tocar un objeto que anteriormente haya sido tocado por una persona o animal infectado.
- De animal a ser humano: Los perros, gatos, y principalmente los cachorros, de estos suelen portar el hongo que provoca la tinea capitis. Otros agentes trasmisores de tiña de la cabeza son las vacas, las cabras, los cerdos y los caballos.
¿Cómo saber si tengo tiña de la cabeza? Diagnóstico
Para diagnosticar la tinea capitis, es importante acudir a un médico profesional, capaz de implementar el protocolo necesario para su detección. El profesional, pondrá en práctica una serie de pruebas que incluye:
- historia médica,
- examen físico,
- diagnóstico de laboratorio,
- examen de pelos arrancados y/o de escamas del cuero cabelludo,
- exploración con lámpara de Wood, un tipo de luz ultravioleta utilizada para observar el cuero cabelludo y distinguir el tipo de hongo.
- La exploración con tricoscopia puede ofrecer un gran aporte como técnica complementaria en el diagnóstico de la tinea capitis.
Por otro lado, es necesario diferenciar la tinea capitis de la dermatitis seborreica, atópica y la psoriasis, ya que estas patologías son muy similares en su manifestación clínica. Este aspecto cobra relevancia al momento de decidir el tratamiento adecuado para combatir la tiña de la cabeza u otra afección.
La recolección de muestras para realizar los análisis puede resultar doloroso para los niños principalmente. En estos casos, el cepillado de la zona puede tolerarse mejor que el uso de bisturí o pinzas.
Los primeros síntomas y signos de la tinea capitis son:
- Aspecto escamoso, grisáceo o rojizo en una o más zonas de la piel, en las cuales el cabello se desprende a la altura del cuero cabelludo.
- Las manchas se expanden gradualmente.
- Zonas del cuero cabelludo con pequeños puntos negros donde el cabello se ha desprendido.
- El pelo luce frágil y se desprende con facilidad.
- Hipersensibilidad y dolor en las zonas afectadas.
Los factores de riesgo que predisponen al contagio de la tiña del cuero cabelludo son:
- Malos hábitos de higiene o cambios en las conductas de limpieza personal.
- Edad: El hongo que provoca la tinea capitis se presenta con mayor frecuencia en niños escolares.
- Exposición a otros niños: La tiña de la cabeza se propaga con facilidad en centros escolares y guarderías, donde el contacto entre niños es frecuente.
- Exposición a mascotas: Las mascotas pueden portar el hongo de la tinea capitis sin manifestar síntomas, y los contagios se producen al establecer contacto con ellos.
¿Cómo tratar la tinea capitis?
El tratamiento de la tinea capitis se realiza a través de medicamentos de toma oral para combatir los hongos. También se puede incluir el uso de champús con medicamento cuyo objetivo es disminuir la propagación de la infección por el cuerpo.
Además, para evitar la propagación de el hongo de la tiña capitis entre personas, puede utilizarse una crema antimicótica sobre la piel infectada hasta que se cure.
Es importante destacar que cualquier tratamiento destinado a tratar tinea capitis o cualquier otra infección por hongos, debe ser prescrito por un médico luego de una detallada exploración del caso. En este sentido, de acuerdo a las características de la infección y del paciente se adaptará el tratamiento con el objetivo de obtener los mejores resultados.
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